El fiscal general del Estado, Emiliano Rolón Fernández, ordenó la auditoría en las sedes ordinarias 1, 2 y 3 de la Fiscalía de la ciudad de Paraguarí, a fin de “detectar problemas en la misión institucional y optimizar el funcionamiento del Ministerio Público”.
Además, el objetivo es evaluar el desempeño de los fiscales.
Fue designada la Dirección de Auditoría de Gestión Fiscal como responsable de la recolección de datos, medición y evaluación de resultados.
Auditorías en otras Fiscalías
En lo que va del año, el fiscal general ya había ordenado auditoría en las sedes fiscales de la ciudad de Villa Elisa y Coronel Oviedo.
En esta última ciudad, se indagan las unidades ordinarias y Especializadas de Delitos Ambientales y de Lucha contra el Narcotráfico.
El Ministerio Público había lanzando el compromiso de realizar las auditorías aleatorias hasta llegar a todo el país.
El objetivo es controlar el rendimiento de los agentes fiscales y funcionarios. Desde el Ministerio Público afirmaron que “el control de la gestión fiscal permite evaluar el rendimiento, con miras a mejorar el funcionamiento en el Ministerio Público”.