La manifestación está marcada para las 22.00 horas, ya que consideran que en horas de la noche es cuando se moviliza la mayor parte del contrabando, especialmente de tomate, explicó.
“En el Abasto es donde está la mayor parte de los contrabandistas”, denunció.
Desde hace varias semanas campesinos de esta y otras organizaciones se vienen reuniendo con autoridades del Gobierno para tratar de frenar el problema del contrabando, pero hasta ahora los encuentros no han tenido resultados, se quejó Ledesma.
Dijo que es evidente que el proceso de transición resta voluntad a los representantes de las instituciones encargadas del control del ingreso de los productos. “No hay voluntad, si decomisan es una pantalla. Es muy poco”, señaló.
Sobre la situación por la que atraviesan los campesinos, dijo que están teniendo superproducción de tomate, pero que están vendiendo a precios irrisorios.
La caja de 20 kilos de tomate se vende a G. 30.000 o G. 40.000 actualmente, siendo que el costo de producirlas ronda los G. 50.000, explicó Ledesma. Es decir, ahora ni siquiera están empatando.
“En el año agrícola 2016 casi el 80% de la producción nacional de tomate ha ido a parar en la basura por la competencia desleal proveniente de nuestros países vecinos y cero respuestas de nuestras autoridades, sin mencionar los otros rubros”, expresa parte de un comunicado de la Asociación de Productores Frutihortícolas del Paraguay, lanzado a propósito de la marcha.
Reivindicaciones. Concretamente, piden que el Gobierno declare a la producción nacional “en situación de emergencia por causa del contrabando”.
Así también solicitan que el Ministerio de Industria y Comercio (MIC) implemente de forma inmediata la licencia previa de importación para los productos frutihortícolas.
Al Congreso le piden que se apruebe el proyecto de ley que tipifica al contrabando como un crimen.
Sobre el Abasto, exigen que se habilite un solo para los productos frutihortícolas.