El viernes pasado, tras el descargo realizado por el intendente de Asunción, Óscar Nenecho Rodríguez, en el marco del pedido de intervención realizado por la Contraloría General de la República (CGR) a su gestión, la diputada Ortega dio a conocer la resolución firmada el 31 de diciembre 2019 para justificar el uso de G. 492.000 millones que eran para obras y cuyo destino se desconoce hasta hoy. Esto llama la atención debido a que el 31 de diciembre es asueto en todas las instituciones públicas, además por otras consideraciones que realizó la Contraloría.
Además, el 6 de marzo del año 2020, ante un pedido de la Contraloría, Nenecho respondió que no contaba con la reglamentación de la ordenanza que regula la Cuenta Única Municipal y se comprometía a reglamentar.
A renglón seguido, precisó que en su propia defensa el intendente argumenta que la propia Contraloría le recomendó reglamentar la ordenanza de la Cuenta Única, en mayo del año 2020.
Luego aparece una resolución con fecha de 31 de diciembre de 2019, que reglamenta la ordenanza de Cuenta Única y tiene la firma del intendente.
“¿Por qué esa fecha? ¿Fue esa la última resolución que firmó el Intendente en 2019 en pleno ASUETO? Si ya contaban con la reglamentación, ¿por qué en marzo de 2020 dijeron que no la tenían?”, se preguntó.
Aseguró que el hecho es muy gravé.
Explicó que la ordenanza de la Cuenta Única excluye absolutamente que pueda usarse el dinero que proviene de préstamo o de emisión de bonos en gastos corrientes.
Asimismo, en la reglamentación, Nenecho amplía e incluye el dinero proveniente de préstamos y de esa forma habilitó la Cuenta Única para utilizar el dinero proveniente de préstamos. En su defensa, el intendente indicó que la Cuenta Única “es una herramienta maravillosa” y aseguró que la CGR no observó el mismo problema a Mario Ferreiro. No obstante, la diferencia es que Nenecho utilizó para préstamos.