Originalmente, la proyección de Petropar era que la planta esté lista para mayo de este año y pueda ser utilizada para la zafra que está próxima a iniciarse, pero debido a varios contratiempos con la contratista, la millonaria obra culminaría con unos siete meses de retraso; es decir, para diciembre.
Si bien las obras civiles ya se encuentran con gran avance, estas solo representan un 14% de toda la licitación, siendo el 86% la fabricación e instalación de las máquinas, la parte más importante del proyecto, la que recién iniciará desde julio y se prevé terminar en diciembre.
Según el reporte de la estatal, los trabajos de instalación de una nueva línea de molienda incluyen todas las obras y servicios afines en las ramas civil, eléctrica, mecánica y de automatización en general, desde el control de entrada de materia prima, pasando por cada una de las etapas del proceso hasta la alimentación de bagazo a la transportadora de caldera.
Además, la provisión e instalación de un nuevo turbogenerador para la cogeneración de energía eléctrica, para el autoabastecimiento de la planta y la adecuación de los supervisorios de los sectores de caldera y destilería.
En ese sentido, se menciona que a la fecha la preparación de suelo, carga, nivelación y compactación ya se encuentra culminada en un 100%, con un pago del 90% del subítem terminado.
En tanto, la estructura de la nave industrial (tinglado del molino) ya se encuentra montada en un 90% y se prevé esté lista para junio.
Los trabajos para caminos y empedrados internos están entre un 80% y estarían culminados entre mayo y junio.
En cuanto a la fabricación de todos los equipos, máquinas, el reporte afirma que se tiene un avance del 50% y que para octubre del 2023 ya se tendrían las bases para la colocación de cada una de ellas.
La parte más importante del proyecto, que implica el montaje electromecánico de los equipos industriales e integración total, se prevé culmine en noviembre.
Recién para diciembre se tiene prevista la prueba de los equipos al vacío, mientras que las pruebas con carga se estima se realizarán para enero del 2024.
El proyecto inicial era que las pruebas del nuevo tren de molienda inicien en febrero para que pueda estar operativo en la zafra de junio, pero en el 2022 las obras estuvieron paradas casi todo el año, debido a que la empresa adjudicada, Estructura Ingeniería (EISA), quedó sin recursos para seguir con el proyecto. También se presentaron retrasos por días de lluvias, que acumulados llegarían a dos meses, más los trabajos de excavación y extracción de residuos que en principio no estaban contemplados en la obra. Justamente este ítem requirió una adenda para modificar el monto del contrato y ampliar el presupuesto por G. 3.000 millones más.