Los resultados muestran que en Argentina, el 45% de los censados están dispuestos a compartir una foto íntima a cambio de dinero. Por detrás se encuentran los mexicanos con 31 %, los chilenos con 27%, seguidos de cerca de los brasileños con 26%, los peruanos con 25 % y los colombianos el 24 %.
Los resultados del sondeo también concluyeron que un 66 % de los latinoamericanos se arrepintieron de compartir una publicación por diferentes motivos: contener imágenes vergonzosas (23%), facilitar datos personales (19%), publicar comentarios negativos hacia otro (18%) o compartir imágenes con poca ropa (6%).
El estudio se realizó en agosto de 2018 a 2.326 personas de Chile, Argentina, Perú, Brasil, Colombia y México en el marco de la campaña “Resaca Digital”. La misma tiene como objetivo concienciar sobre los riesgos a los que se exponen los s, al compartir en Internet cierto contenido personal.
“Los s emulan en sus redes lo que ocurre cuando se van de fiesta: se toma más de la cuenta, se entrega demasiada información personal y se tiende a confiar más de lo debido en desconocidos”, explicó Dimitry Bestuzhev, director del Equipo Global de Investigación y Análisis de Kaspersky Lab en América Latina.
La encuesta también reveló que un 27 % de los latinoamericanos itieron que se tomaron fotos o grabado a sí mismos en una situación íntima con su teléfono.
En relación con este dato, se identificó que el 40 % de los s consultados compartieron la contraseña de su móvil con alguien más.
“Los encuestados justifican esta decisión porque saben que después podrían cambiar de contraseña, pero lo cierto es que compartir la clave de nuestros dispositivos con terceros, aunque éstos sean familiares o amigos, es el primer paso para terminar, eventualmente, siendo víctima de robos, usurpaciones o estafas”, concluyó Bestuzhev.
Perfiles públicos
Respecto a la información compartida, la mitad de los latinoamericanos reconoció tener una cuenta abierta en la red social Instagram y un 32 % su cuenta de Facebook abierta a visitas.
“El riesgo de tener un perfil público recae en que la información personal puede ser vista por cualquier persona sin conocer las intenciones de quien visita el perfil y cuál será el uso que esta persona le dará a las fotos o datos publicados”, puntualizó Bestuzhev.
Otro de los peligros es dejar abiertas las sesiones de las redes sociales en los dispositivos móviles, práctica que hasta un 80 % de los latinoamericanos realiza.